Porque todo tiene un principio...

1º CAPITULO, 
Espero que os guste  = )

Como todas las mañanas me levanté a las 7.30, me duché, me vestí, peine mi pelirroja melena e hice mi cama (podría contratar a alguien ya que trabajo de jefa de diseño de Gucci, pero prefiero tener todo “ordenado” a mi gusto). A las 9.15 cogí, junto con Jo, la limusina que me llevará al restaurante más caro de toda California, para desayunar con Peeta y mi mejor amiga. Al llegar, como siempre, pedí un cappuccino frio y una tostada con mermelada de fresa. Cuando ya eran las 10 de la mañana Jo y yo nos fuimos al aeropuerto, en la misma limusina de antes, para coger el jet privado que nos llevará al tejado de la boutique en la que trabajamos en  Nueva York. Aclaro, tanto Jo (es una especie de prodigio como Peeta y se saltó 2 cursos) como yo somos diseñadoras jefas de Gucci, en la zona de Manhattan, donde está la boutique, pero trabajamos cara al cliente ya que nuestra tienda es la de mayor prestigio de la zona. Estábamos en nuestro descanso cuando llegó él, el mejor amigo de Johanna y la persona más insoportable que conozco, Finnick Odair. Entró por la puerta como si el mundo le perteneciese (Ahhh!! No lo aguanto!!) Con su novia, la “guapísima” modelo Cashmere. Jo se acercó a saludarlos y yo me estaba a punto de escaquear para entrar en el taller cuando…

- ¡Cresta! – Me llamó Odair

- ¿Qué quieres Odair? – Le respondí de la mejor manera posible.

- ¿Te importaría atenderme tú? – Yo estaba a punto de decirle que porque no le atendía su amiga cuando me di cuenta de que estaba hablando con Gale Hawthorne, chico que le gusta, entonces para hacerle un favor a mi amiga le dije:

- Con mucho gusto (nótese el sarcasmo), ¿qué deseas comprar? – Odair miró a Cashmere y le dijo:

- Cash, ¿qué quieres? – Ella le miro con la cara de tonta más grande que he visto en mi vida.

- Un vestido de gala hecho a medida, colores rojo, rosa y dorado – Dijo con una sonrisa de anuncio. Yo ya había apuntado todo cuando me di cuenta de lo que había pedido y le dije:

- Creo que será lo mejor que cambies el rosa por otro color, no creo que quede bien esa combinación.

- ¿No se supone que es tu trabajo hacer diseños al gusto del cliente?- Me preguntó.

- En parte sí pero… - No me dejo terminar ya que dijo:

- Pues ya está, lo quiero diseñado por ti, en una semana vengo a verlo y decidir si lo compro o no. Mas te vale que el diseño sea bueno, o si no, tu querido jefe se enterará de que no sirves para este trabajo y te echará. – Miró a Odair con esa sonrisa de estúpida.  ¡Lo que quería era que quedase mal frente a Peeta, pero que clase de persona es esa! Entonces dijo:

- Chau, chau, nos vemos.- Y se fue

- Adiós Cresta, si no quieres quedarte sin trabajo y que la empresa de Peeta se quede sin clientes más te vale hacerlo bien.- Me dijo el novio de Cashmere.

- Es mi trabajo, Odair, no estaría aquí si no fuera porque soy buena en ello.- Le dije

Iba a replicar cuando llegó Johanna, por lo que puso una sonrisa falsa y se marchó. Johanna me miró con cara de: ¿Y a este que le picó? Y yo le respondí con mi cara de: Luego te cuento.

El resto de la jornada pasó como siempre. Como todos los viernes a las 9 de la tarde Peeta vino a recogernos en su jet privado para ir de compras al distrito que tiene en Los Ángeles, el único inconveniente que hay es que Odair viene algunas veces, como hoy, por lo tanto, no pude contarle a mi mejor amiga lo que pasó con Cashmere.

Al terminar las compras nos fuimos a Chicago en el jet de Peeta para ir a los estudios  de grabación que nos regaló a mí y a Jo a principios de año. Al llegar soltamos las bolsas y entramos corriendo a calentar la voz mientras Peeta preparaba todo para grabar las canciones y, mientras tanto, Odair miraba todo con mucha curiosidad, era la primera vez que venía.

Empecé  a cantar Better in Stereo (de Dove Cameron) para calentar la voz cuando entra el rubio amigo de mi amiga y dice:

 - Jo, dios mío, que bien cantas!! – Johanna me mira y le dice:

- Yo aún no canté a mi me toca en la segunda estrofa – Odair pone una cara muy extraña, se gira me mira y sale sin decir nada más.

Nos miramos y nos empezamos a partir de la risa (estamos muy mal, ya lo sé), entonces Peeta nos dice:

- Chicas, ya está todo listo, podéis empezar.-

- Vale, gracias, vamos Jo?- Le pregunto a mi mejor amiga.

- Por supuesto, tu primera.- Me dice, y empiezo a cantar: (Violeta, yo; Azul, Johanna y Verde, las dos)

Na na na na

na na na

Take a look around

Who would Have thought we'd all be here

So lest mess around

Cause the future is unclear

We got nothin better to do

Were just tryin to get through

Can you here me

Can you here me

Yeah!

Let the music groove you

Let the melody move you

Feel the beat and just let go

Get the rhythm into your soul

Let the music take you

Anywhere it wants to

When were stuck and can't get free

No matter what we'll still be singing

C'mon c'mon

turn up the music

It's all we got were gonna use it

C'mon c'mon

turn up the music

Yeah

All we have is now

Let's make the most of this

C'mon break it out

So everyone can hear it

They don't have to understand

but we'll make em'if we can

Do you hear me?

Are you with me?

Yeah!

Let the music groove you

Let the melody move you

Feel the beat and just let go

Get the rhythm into your soul

Let the music take you

Anywhere it wants to

When were stuck and can't get free

No matter what we'll still be singing

C'mon c'mon

turn up the music

It's all we got were gonna use it

C'mon c'mon

turn up the music

Yeah

C'mon c'mon

turn up the music

It's all we got were gonna use it

C'mon c'mon

turn up the music

turn up the music

Let the music groove you

Let the melody move you

Feel the beat and just let go

Get the rhythm into your soul

Let the music take you

Anywhere it wants to

When were stuck and can't get free

No matter what we'll still be singing

C'mon c'mon

turn up the music

t's all we got were gonna use it

feel the beat and just let go

get the rhythm into your soul

Let the music take you

Anywhere it wants to

C'mon c'mon

turn up the music

Yeah!

Al terminar, Peeta  vino a darnos un par de consejos para la grabación, la grabamos y nos pusimos a decidir una canción, en eso, entra Odair y me dice:

- Vaya Cresta, tienes buena voz, deberías cantar más a menudo.- Yo me quedé en shock, ¿el creído y arrogante Finnick Odair me está diciendo que canto bien?

- Gracias Odair.- Entonces tuve una idea.- ¿Quieres cantar tu una?

- No canto muy mal, te lo aseguro, ¿a que si Jo?- Le dijo a mi amiga mirando para ella.

- Creo que nunca te escuché cantar, venga canta con Annie una, mira la escojo yo.- En eso yo ya sabía lo que le pasaba por la cabeza a mi amiga. Entonces dije:

- No, no, no y no. Canta Odair solo.- El rubio ese me miró y dijo:

- Venga pelirroja no será tan malo, porfa!- Parecía un niño pequeño, entonces hice algo de lo que me arrepentiré toda mi vida:

- Vale Odair, pero solo una.- Johanna nos miró nos dio dos micrófonos portátiles para poder movernos y dijo:

- Y vais a cantar: Bella y Bestia son, será una canción de una película infantil pero es muy bonita, seguro que hacéis un dúo precioso.- Entonces, no esperé más, antes de arrepentirme, le di la señal a Peeta y empecé: (Violeta yo; Azul Odair y Verde los dos)

Se oye una canción

que hace suspirar

y habla el corazón

de una sensación

Grande como el mar

Odair me miraba embobado, mientras yo pensaba: “Que tienes novia estúpido”

Algo entre los dos

cambia sin querer

nace una ilusión

tiemblan de emoción

bella y bestia son

Hoy igual que ayer

pero nunca igual

siempre al arriesgar

puedes acertar

tu elección final

Debes aprender

dice la canción

que antes de juzgar

tienes que llegar

hasta el corazón  

Debes aprender

dice la canción

que antes de juzgar

tienes que llegar

hasta el corazón

Entonces fue cuando me fijé en esos ojos azules mar, que no saldrían de mi cabeza a partir de ahora.

Cierto como el sol

cierto como el sol

que nos da calor

no hay mayor verdad

la belleza esta

en el corazón

Nace una ilusión

tiemblan de emoción

bella y bestia son

Durante la canción, nos habíamos ido pegando y estamos a centímetros del otro. El corazón se me aceleró al tenerlo tan cerca, entonces me dije “Annie Cresta, sepárate ahora mismo de ese rubio de bote”.
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A y también quería recomendaros la canción que me está inspirando para escribir la nueva entrada  que descubriréis dentro de poco...