jueves, 18 de septiembre de 2014

Para una personita capaz de girar el mundo

No existe la absoluta soledad, porque, fijo que a lo largo de nuestra vida alguien nos ha querido. Puede ser que no nos demos cuenta, o que no lo valoremos de la misma manera, sin embargo, sigue estando ahí ese sentimiento precedido por una persona que ocupa su lugar en el espacio.
Puede llegar a haber muchísimas personas importantes en nuestra vida, y aún así siempre hay un primer puesto. En mi caso, la persona ganadora, es en la que yo  he depositado más amor. Y la verdad es que ella misma se lo ha ganado.
Suele haber empates, no lo contradigo, eso sólo significa una cosa.
Que hay varias personas importantísimas en tu vida.
Las eliges tú. Pero gracias a lo "que dichos personajes" han demostrado que son.
Cuando tú, por ejemplo, le entregas tu confianza a alguien, le estás entregando también el poder de traicionarte y hacerte daño. Pero cuando tú le entregas tu confianza a alguien es porque conoces a esa persona lo suficiente como para poder pensar que puedes confiar en ella, y esa es la clave de todo.

Pero como no tenía pensado escribir esta entrada para enliaros la mente, voy a dejar la confianza y la soledad para otro día.

Es más, esta entrada se la quería dedicar a una persona importantisima. Para mi, claro.
Una persona que con tan solo una palabra o un pensamiento expresado en la verdad, es capaz de hacerme reír, llorar, cantar, gritar, saltar, odiar, correr, dibujar susurrar, liberar, amar...

Es un persona que me conoce como soy, que me reconocería con los ojos cerrados, igual que yo a ella, porque nuestro cariño, es un pequeño infinito que hemos ido formando a lo largo de los años.

Una persona tan especial, que aunque a veces no lo demuestre, yo se que me entiende, y sabe como estoy y como me siento en cada instante con solo mirarme a los ojos. Una persona que me quiere tanto, que deposita sus esfuerzos en intentar pintar mi vida de color.

Y lo que escribo y que ahora mismo estás leyendo, no creas que lo escribo por escribir, y no pienses que lo pienso y lo digo, solamente porque quiero hacerle un regalo. NO.

Si piensas así, en realidad, estás muy equivocado; pero que digo, estás equivocadísimo.

Estas palabras, se han ido formando solas en mi mente, alimentándose de la fuerza que el amor es capaz de brindar. Y creciendo cada vez que esta persona, me cuida, se preocupa por mi, me aconseja, me ayuda, me entiende, me libera, me enseña y me quiere. Es decir, SIEMPRE.

Así que no me queda mucho por escribir, pero el tiempo y el espacio ya no importan si esta persona tan especial, en un día único, lee en este blog, todo lo que puedo expresar en palabras.

Por supuesto, hay pensamientos a los que no soy capaz de dar forma, de hecho nunca será suficiente.
Pero soy una persona normalita (en la medida de lo que hay) Y por esa misma razón, no soy perfecta.
Así que espero de todo corazón, que seas capaz de dejar volar tu imaginación, mientras leas estas palabras sinceras y que así consigas completar la magia que yo he sentido a lo largo de cada segundo que he pasado con esta feliz persona.

Y solamente me queda algo por decir...

FELICIDADES MAMÁ, TE QUIERO HASTA EL INFINITO Y MÁS ALLÁ.

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